A lo largo de la semana muchas de
nuestras miradas habían estado puestas en las predicciones meteorológicas de
cara a la ruta del sábado. Unos días (principios de semana) las noticias eran
más esperanzadoras pero a medida que iba transcurriendo la semana las noticias
eran más desfavorables de cara al sábado.
Con esa premisa nos juntamos el
sábado, un poco más pronto de lo habitual (por el viaje en autobús). Una vez
que estábamos todas las personas pusimos rumbo a San Vicente de la Barquera.
Decir que fue un viaje tranquilo y cómodo (más viajando en autobús) Tras unas
dos horas y media llegamos a San Vicente de la Barquera, donde la lluvia hacia
acto de presencia. Aprovechamos los bajos de un edificio para almorzar un poco,
ponernos la pertinente ropa para combatir la lluvia… Tras todo ello y viendo
que no escampaba nos dispusimos a caminar dispuestos a realizar la ruta
prevista. Para ello pusimos rumbo a la playa del Tostadero, apuntar que para
realizar esta ruta es imprescindible mirar con antelación la tabla de mareas y
que esta sea baja.
Primeros pasos de la ruta "El Pájaro Amarillo"
Caminando por la playa del Tostadero
Bella panorámica tomada en la playa del Tostadero
En esta ocasión era una novedad caminar por la playa, la
verdad que es una bonita sensación caminar junto al mar. En cuanto a la lluvia
en este inicio de ruta era intermitente y por tanto llevadera. Tras atravesar
la playa del Tostadero subimos unos metros por un ancho camino para dar a la
Punta del cabo de Oyambre. Las vistas son magníficas y el paisaje espectacular.
Bonita panorámica de la playa del Tostadero
Los paraguas hicieron su función a lo largo de la ruta
Panorámica desde la Punta del Cabo de Oyambre
Los intrépidos aventureros que participaron en la ruta
Allí tras caminar unos metros por una marcada sendita y
paralelos al mar paramos almorzar. La lluvia era más intensa, tras el almuerzo
(pasado por agua) comenzamos nuevamente a caminar con el fin de ir a dar a la
playa de Oyambre. Este trozo fue el comienzo de una “pequeña aventura” ya que
la senda que baja a la citada playa estaba anegada por el barro, el agua…
Primeramente bajo un pequeño grupo pero viendo las dificultades dieron marcha
atrás, así que tocaba encontrar un camino para seguir la ruta prevista.
Encontramos una senda que se metía por un bosquecillo, poco a poco fuimos
avanzando, hasta llegar a un paso que requería un poco más de atención ya que
era una bajada que a medida que iba pasando la gente hacia que uno se resbalase
más, por lo que había que tener la correspondiente precaución. Hubo alguna que
otra culetada, pero al final todos pudimos continuar la marcha.
De camino por la playa de Oyambre
Por fin, llegamos a la playa de Oyambre, allí nos tocaba
recorrer gran parte de ella. La lluvia era un acompañante más de la
jornada. Tras varios kilómetros por la
playa salimos de ella a nuestra derecha con el fin de enlazar con un tramo del
Camino de Santiago del Norte, para ello pasamos por un campo de golf y fuimos a
salir a la carretera. El objetivo era llegar a la meta, el pueblo de La
Revilla.
Recorrimos un tramo del Camino de Santiago del Norte
Por la tarde tuvimos ocasión de visitar Santillana del Mar
Decir que después del almuerzo la jornada estuvo marcada por
la lluvia, tras llegar a La Revilla, nos cambiamos y montamos en el autobús con
el fin de regresar de nuevo a San Vicente de la Barquera. Allí parece que el
tiempo nos dio una tregua y nos dejo comer tranquilos, tras la comida
aprovechamos para tomarnos un reconfortante café.
Ya por la tarde, y viendo que el tiempo acompañaba, aprovechamos
para visitar Santillana del Mar.
En fin amigos/as, una ruta marcada por el agua, pero que no
por ello dejo de ser un bonito itinerario.
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